lunes, mayo 18, 2009

GRACIAS POR EL FUEGO

Llueve lento sobre el Uruguay. Benedetti se ha marchado hace unas horas y ha dejado un vacío en la literatura universal. Yo por mi parte me siento agradecido por los cuentos y poemas que me aliviaron durante el periodo universitario y los años posteriores. Por las grandes distancias y las cercanías. Por las geografías. Por los montevideanos y el sexo de los ángeles. Por la tregua. Por la noche de los feos. Por los astros y vos. Por puentes como liebres. Por los lugares, las avenidas, los paseos, los cafés, los parques, las estatuas. Porque yo también soy un viudo de Margaret Sullavan.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

karnal, ya escribí cinco veces el mensaje, pero para los que la perdida es un lujo que no nos damos, para los que aprendemos a dibujar a una mujer desnuda y en lo oscuro, la muerte no duele tanto como el puñal que mata, me duele que se vaya, pero puedo llorar agradecido por las mil formas que me enseño a querer, a decir lo que yo no supe cómo decir,hasta hoy...
gracias Mario, nos vemos pronto.

rosarito dijo...

Esperaba leerte al respecto, sabía que le escribirías tan bonito como lo has hecho. Don Benedetti lo merece..

Rous dijo...

Quiero estar jodida y radiante como Mario
Que cuenten conmigo no hasta dos ni hasta diez
Y luego, como Mario, quiero despedirme del número tres

Quiero que Serrat cante lo que escribo
Y que me diga que soy linda desde el pie hasta el alma

Quiero tener una soledad concurrida
Asaltada por una idea de Milanés, Puebla y Gelman
Una de cada uno

Quiero ser fundamento de alguna estrategia
E instrumento de alguna táctica
Sin el telón, sin los abismos

Quiero tener un paso vagabundo
Por inspirar a Mario
Y que Mario me diga
Que soy para sus labios un destino
Cuando esté desnuda y en lo obscuro


Y como Mario, quien sueña con un Dios que es mujer,
quiero un amor común (con o sin sábanas)
Un amor con el que en la calle codo a codo,
seamos mucho más que dos
(publicado en mazapán en agosto del 2008)