sábado, septiembre 27, 2008

PA

Hace un mes, se fue mi pa. Lo extraño. Extraño platicar con él, pelearme con él, cenar con él y andar con él en su taxi. Extraño verlo sonreir. Verlo dormir. Pero algún día, nos volveremos a ver y recordaremos los momentos, los viajes, las tardes en casa, y todo el tiempo que pasamos juntos. Todo este tiempo que nos dedicó, se queda ahora guardado en un baúl de inigualable valor que atesoraremos siempre.

Donde estés pa, te mando un beso, una palmada en el hombro y un piquete de panza. Descansa papá, descansa. Nos vemos después.